viernes, julio 13, 2007

Chafalonía

No recuerdo si fue Robert Graves o la serie televisiva de su novela Yo, Claudio que puso el sarcástico comentario en labios de Livia de que el pueblo romano gustaba pensar que se gobernaba a sí mismo. En la historia hay también pueblos subyugados que han creído gobernarse a sí mismos y que son independientes o autónomos sin en realidad serlo.

Pensé en ello al leer lo que nos cuenta Álvaro Vargas Llosa en La mestiza de Pizarro. Para evitar sublevaciones, los conquistadores quisieron hacerle creer a los incas que su nación era independiente o al menos autónoma. Los hermanos Pizarro coronaron soberano al inca Manco Cápac II poniéndole “una corona de chafalonía y un manto de lentejuelas” (p. 21). Antes de pasar a ser chafalonía, posiblemente la corona española de Manco Cápac II formara parte de objetos de gran valor étnico y cultural.

Chafalonía no aparece en mi Larousse 2003 ni en el Clave (2004). Sí aparece registrado en el DRAE (2001): conjunto de objetos inservibles de plata u oro, para fundir. Dicho vocablo, que forma pues parte del léxico histórico de la conquista, se registra notablemente en Diccionario de las Américas (1995) y también lo ha registrado Elvira Muñoz en su Diccionario de Palabras Olvidades o de uso poco frecuente (1993) acompañado del sinónimo algo irónico de “chatarra (de plata u oro)”.