martes, abril 05, 2005

moro

En los tiempos del imperio romano, lo que hoy conocemos como Marruecos, era parte de Mauretania, y su gentilicio, maurus. En castellano pues, se les conoció como moros a los musulmanes que de allí pasaron a la península ibérica (invitados por los godos).

En España “moros y cristianos” es una fiesta pública en la que, vestidos de “moros y cristianos”, se representan batallas de antaño. En Puerto Rico y Cuba, tales antiguas y lejanas batallas pasaron a ser un plato delicioso de arroz blanco con habichuelas negras.

Pero, volviendo a España, si bien los moros fueron objeto de grandes y trágicas luchas, lo fueron también de la literatura castellana. He aquí algunos versos salpicados de Tirso de Molina (1571–1648).

Moros hay si quieres moros;
si apetecen tus deseos
torneos, te hacen torneos;
si toros, correrán toros.
(…)
de los sentidos banquete,
de los gustos ramillete,
esfera del pensamiento,
olvido de los agravios,
manjar de diversos precios,
que mata de hambre a los necios
y satisface a los sabios.